Festivayud, Calatayud entre dos luces y otros eventos culturales y turísticos han servido para poner en valor el casco antiguo de la ciudad. Estos programas han dinamizado la actividad hostelera, incrementado el turismo y generado movimiento en el centro bilbilitano, especialmente en verano. También han servido para conocer espacios patrimoniales e históricos y reivindicar las tradiciones locales.