El grupo popular del Ayuntamiento de Calatayud se opone a los recortes en la lucha contra la violencia de género que ha llevado a cabo el Gobierno de Aragón. Con la firma de un nuevo contrato de atención social a las víctimas de violencia de género, los municipios de Calatayud, Barbastro y Alcañiz han perdido su punto de atención.
Se trata del contrato que licita el Gobierno de Aragón cada dos años para que una empresa se haga cargo de este servicio. Entre las características del pliego de condiciones, el Gobierno de Aragón establece un mínimo de tres puntos de atención (hasta ahora existía este servicio en seis puntos) y se hacía referencia en anexos a la subrogación de todos los trabajadores sociales.
Una vez el contrato firmado con la nueva empresa prestataria del servicio, cinco profesionales han sido despedidos y al mismo tiempo se han cerrado los puntos de asistencia de Calatayud, Barbastro y Alcañiz. Según la empresa, estos centros de atención no se consideran rentables, sin embargo, tal y como ha remarcado la portavoz de Bienestar del Partido Popular en las Cortes de Aragón, Ana Marín, “en violencia de género no cabe hablar en términos de rentabilidad económica”.
Este recorte afecta directamente a las víctimas de las tres localidades, que no dispondrán a partir de ahora del servicio. Pero además, afecta a municipios que, sin ser cabecera provincial, no sólo ofrecen servicios en el ámbito local sino que cubren las necesidades de un elevado número de localidades que se encuentran en su entorno. Por lo tanto, se trata de un elevado número de personas a las que afecta directamente el cierre de estos puntos de atención.
Para el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda: “Lamentamos profundamente esta reducción de medios técnicos en un tema tan sensible como es la violencia de género. El Gobierno de Aragón está demostrando un interés nulo por la lucha contra la despoblación llevando a cabo medidas como esta”.
El grupo popular del Ayuntamiento de Calatayud presentará una moción en el próximo Pleno Municipal para que la localidad tenga los mismos medios y servicios que el resto de Aragón.